Anastasia Skukhtorova ha sido una líder innovadora desde su debut en el escenario de la competición internacional en 2009. Hoy en día, apenas hay un atleta de pole que no se inspire en su estilo de actuación. A lo largo de la última década, Anastasia ha impresionado al público de todo el mundo con rutinas que exhiben su característica flexibilidad y sus elegantes movimientos, a menudo ambientados con música clásica.
Sin embargo, una de las cualidades más queridas e impresionantes de Anastasia es su determinación para lograr cualquier cosa que se proponga. Muchos han oído que Anastasia no tiene experiencia en danza, gimnasia ni ningún otro deporte, y sin embargo ganó su primera competición nacional tras sólo 11 meses de entrenamiento en el pole, y alcanzó el estrellato internacional en menos de 3 años. Dice que cree que cualquiera puede alcanzar sus objetivos, por muy inalcanzables que parezcan, si también cree en sí mismo.
La experiencia de Anastasia en pole comenzó como la de muchos otros: con el deseo de tomar clases de baile que se centraran en sentirse femenina y elegante. Al crecer en Moscú, siempre soñó con ser bailarina; le encantaba el movimiento pero no tenía formación clásica. A los 18 años, tras ver películas americanas como Step Up y Honey, se animó a tomar su primera clase de pole en un estudio de Moscú.
Anastasia se enganchó al instante y empezó a preparar su primera competición al año siguiente. En 2009 compitió tres veces: en abril, como principiante, en la primera competición rusa de danza pole; en agosto, en la división profesional del Campeonato Ruso de Danza y Fitness Pole, en San Petersburgo; y en noviembre, en la fase de clasificación para el próximo Campeonato Mundial de Danza Pole. Anastasia ganó su clasificación, lo que le dio la oportunidad de competir en el Campeonato Mundial de Zúrich.
El Campeonato Mundial tuvo lugar en octubre de 2010, con sólo 13 atletas de todo el mundo que habían sido aceptados como finalistas en la categoría de Anastasia. Anastasia considera esta experiencia como una de las competiciones más importantes de su carrera, en gran medida por la oportunidad de conocer, actuar junto a estos atletas a los que tanto respetaba y admiraba, y de inspirarse en ellos.
Al año siguiente, Anastasia compitió en el concurso Pole Art de Helsinki, donde quedó tercera en su categoría. El vídeo de su actuación en Pole Art de 2011, con más de 4 millones de visitas en YouTube, ayudó a lanzar la carrera de Anastasia. Tras esta actuación, le ofrecieron inmediatamente contratos de enseñanza en el extranjero, y decidió hacer del pole su profesión a tiempo completo. Y finalmente, en noviembre de 2012, Anastasia ganó su primer título internacional en la Copa del Mundo de Pole en Río de Janeiro (Brasil), donde quedó primera en la división profesional.
Después de lograr el reconocimiento internacional, Anastasia se sumergió de lleno en el pole como profesión. Viajó por todo el mundo impartiendo talleres, juzgando competiciones y, ocasionalmente, compitiendo y actuando. En 2014-2015, Anastasia realizó una gira con la compañía "Cirque le Noir - the Dark Side of Cirque" como artista invitada. En la actualidad, sigue liderando la industria del pole, inspirando a sus alumnos y al público con su cautivador estilo de pole. Anastasia reside ahora en Dinamarca, pero sigue recorriendo el mundo para enseñar y actuar, y siempre intenta encontrar algo nuevo que explorar.
Más recientemente, compitió en la temporada 2018 de "Denmark's Got Talent". Dice que su objetivo no era ganar, sino mostrar al nuevo público lo hermosa que puede ser la danza pole. Ella atribuye su éxito a una combinación de programas de entrenamiento, artistas de circo y entrenadores de pole que la han ayudado en el camino, y el deseo de hacer algo "diferente." Por ejemplo, cuando Anastasia empezó a competir, era una de las únicas bailarinas que actuaba descalza o que lo hacía con música de ópera u orquesta. Anastasia anima a sus alumnos a centrarse en lo que les hace únicos para desarrollarse como atletas.
